reflexionando

Cuando navegas por tu pasado observando viejas fotografías o leyendo viejos escritos te das cuenta de lo que cambia la vida en ocasiones en tan poco tiempo, como el más efimero segundo o la más diminuta decisión puede afectar hasta la más firme de tus creencias. AL bucear por el pasado llegan a tu mente recuerdos, lágrimas y risas, tristeza y felicidad y los añoras, por unos instantes quieres volver a vivirlos, quieres ser la persona que eras antes, quizá las vivencias que te han ocurrido te han llevado a realizar ese cambio o quizá sea tan simple como que has madurado, el caso es que algo dentro de ti no te hace ser como eras, pero cuando la idea de volver al pasado te recorre la mente algo te lo impide , estás seguro de que todo pasa por algo y si ahora eres de esa forma es porque quizá hayas aprendido a vivir o te hayas adaptado a las circustancias.
También al recordar llegan a tu memoria personas que eran importantes en tu vida, que en mayor
o menor mesuara se fueron adentrando en tu corazón y que el tiempo las alejó de ti, sientes nostalgía por ellas, pero también sientes que ya no deben formar parte de tu vida. ALgunas de esas personas se fueron de tal forma que aun tienes un poco abierta la cicatriz que dejarón y duele con solo rozarla, pero también sabes que es mejor dejar cicatrizar completamente y no intentar que entren de nuevo, pues solo se conseguirá dejar la herida abierta exponiendola a infecciones.
Y al reflexionar sobre esto solo puede pasar un sentimiento por tu cabeza, miedo, miedo a que todo cambie más de lo que ha cambiado, a dejar de ser tu, a que personas que ahora son imprescindibles en tu vida, dejen de estar en ella, a que otras personas puedan llegar tan dentro y luego irse creando nuevas cicatrices igual o más dolorosas que las anteriores, pero entonces piensas en lo bueno que te ha traido el dolor, en las cosas que has aprendido y descubres que la vida es una aventura que debes seguir viviendo que quieres que te siga sorprendiendo que quieres encontrar sentimientos diferentes, escondidos, olvidados o ya vividos en los lugares más remotos o con las personas más inesperadas, te dás cuenta que la vida es un camino lleno de penumbras en el que avanzas casi oscuras, solo viendo lo que tienes en tus narices, pero aunque resulte tentador no puedes ni retroceder ni quedarte parado, porque puedes encontrarte decepciones, pero seguro que encontraras alegrías, ya que la vida es el misterio más indescifrable y maravilloso que puede llegar a existir y los sentimientos son la esencia de ese misterio, asi que vive, siente y sigue hacia delante

2 comentarios:

A veces no apreciamos a las personas que realmente hemos tenido a nuestro lado o nos han ayudado en los momentos dificiles, hasta que de un plumazo las apartamos para poner a otras en su lugar creyendo que son lo mejor de tu vida y luego resulta que esas personas que has puesto en lugar de las otras sólo nos han querido utilizar. Eso es la enseñanza de la vida misma no significa que madures por que si no ves la realidad y la sigues enmascarando volverás a caer en la misma rutina. ANONIMUS

 

Estoy de acuerdo, aunque no se, creo que el tiempo te hace ver que decisiones has tomado bien y cuales mal y llega un momento en que aprendes las enseñanzas de la vida y no vuelves a caer en el mismo error, supongo que eso será madurar

 

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